Puerto Rico (Parte 2)
El día se ha ido de a poco y ahora debo buscar un refugio para pasar la noche. Un lugar sin anónimos que puedan poner en peligro mi descanso. En ese momento cuando Alejandro me brinda algunas opciones para mi carpa aparece el Nene Benítez. Todo pueblo tiene a su loco. Ese personaje característico que ha perdido la decencia social y vive a medios pasos de la realidad. Un elemento de infinita imaginación lleno de los más verosímiles alegatos para emprender un accionar incomprendido por el común de los mortales. Locos como Marcelo en Aregua, el Pelón de puerto Iguazú, el que pidió la piedra para hablar con el diablo en Jaén y muchos otros más que crean un realismo mágico con asfalto, adoquines y hollín. El Nene Benítez posee todas las características para ser colocado en esta categoría y lo avala su rutina de todas las mañanas. Pasa por una panadería donde le dan el pan de ayer, fresco aun solo que un día en el sistema internacional de calidad de pan significa basura, co...